No hay nada peor que asistir a una fiesta a la que no se queire asisitir y más aún permanecer en ella durante horas por "obligación".
Esta es la amarga, denigrante y triste situación que tuvieron que vivir y soportar decenas de personas "invitadas" a la fiesta por el Día del No Docente Universitario que el "cerisolismo" o "cerisolísimo" armó la mañana del jueves pasado (26 de noviembre).
El lugar elegido para montar el "circo" fue nada menos que el patio del Rectorado. Allí, ante la atenta mirada de Juan B. Terán, se pudieron ver a, sobre todo, trabajadores del área de Construcciones Universitarias (no votan para las elecciones del próximo año). Que vinieron al pelo para "llenar" un patio en el que brillaron por su ausencia los no docentes de ley. Aquellos que, como todo personal de la UNT, siente estar trabajando en medio de la opresión, la discriminacióny la persecución "cerisolista", lideradas por Luis Sacca (subsecretario administrativo) y el secretario de Bienestar (¿?) Ramiro Moreno. Aquellos que son víctimas de una gestión históricamente terrible.
Así, los "invitados" degustaron sanguchitos, gaseosas, empanadas y demás alimentos típicos de un catering súper fino. Fue la ostentación pura para demostrar "apoyo". Que en realidad fue falso. No había nadie de "peso" en esa fiesta ridícula. Pero no extrañó esa maniobra. Fue una más del "cerisolísimo", que se debilita día a día y que pierde fuerza política dentro de la UNT de cara a los comicios de mayo. Es posta que el Rector Cerisola anda malhumorado, agresivo con sus colaboradores e histérico.
Cosecharás tu siembra, reza un viejo adagio.
Desde este espacio saludamos a los No Docentes de verdad que tiene la UNT. A aquellos que darán el voto a la "gente" de la Universidad. Y no a los que fueron o "tuvieron" que ir a una fiesta No Decente.
Esta es la amarga, denigrante y triste situación que tuvieron que vivir y soportar decenas de personas "invitadas" a la fiesta por el Día del No Docente Universitario que el "cerisolismo" o "cerisolísimo" armó la mañana del jueves pasado (26 de noviembre).
El lugar elegido para montar el "circo" fue nada menos que el patio del Rectorado. Allí, ante la atenta mirada de Juan B. Terán, se pudieron ver a, sobre todo, trabajadores del área de Construcciones Universitarias (no votan para las elecciones del próximo año). Que vinieron al pelo para "llenar" un patio en el que brillaron por su ausencia los no docentes de ley. Aquellos que, como todo personal de la UNT, siente estar trabajando en medio de la opresión, la discriminacióny la persecución "cerisolista", lideradas por Luis Sacca (subsecretario administrativo) y el secretario de Bienestar (¿?) Ramiro Moreno. Aquellos que son víctimas de una gestión históricamente terrible.
Así, los "invitados" degustaron sanguchitos, gaseosas, empanadas y demás alimentos típicos de un catering súper fino. Fue la ostentación pura para demostrar "apoyo". Que en realidad fue falso. No había nadie de "peso" en esa fiesta ridícula. Pero no extrañó esa maniobra. Fue una más del "cerisolísimo", que se debilita día a día y que pierde fuerza política dentro de la UNT de cara a los comicios de mayo. Es posta que el Rector Cerisola anda malhumorado, agresivo con sus colaboradores e histérico.
Cosecharás tu siembra, reza un viejo adagio.
Desde este espacio saludamos a los No Docentes de verdad que tiene la UNT. A aquellos que darán el voto a la "gente" de la Universidad. Y no a los que fueron o "tuvieron" que ir a una fiesta No Decente.
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